Escocia

Escocia tiene algo más de 5 millones de habitantes y exporta al año 1.000 millones de botellas de whisky, ocupa la zona norte de Gran Bretaña y su superficie es más o menos como la de Castilla La Mancha. La forma más barata de llegar es en un vuelo de bajo coste como easyJet (www.easyjet.com), pero de esta compañía sólo salen aviones desde Madrid o Barcelona, y se tarda dos horas más o menos en llegar. En Escocia en los meses de junio y julio no anochece hasta las 11 de la noche.

Se habla inglés y gaélico escocés, aunque esta última muy poca gente. La moneda es la libra que equivaldría a 1'48 €.

Su capital es Edimburgo, y de ella vamos a hablar. Es la 2ª ciudad más visitada en Gran Bretaña después de Londres. En agosto se celebra el festival cultural más importante del planeta según el libro Guiness de los Récords (www.edinburghfestival.com). Edimburgo se divide en la ciudad vieja y la ciudad nueva. Una de las tabernas más conocidas de Edimburgo es Deacon Brodie's Tavern, una de las más antiguas de la ciudad. La calle central de la ciudad vieja de Edimburgo es The Royal Mille, que tiene muchas tiendas de productos típicos y es una de las más visitadas por los turistas.

Uno de los emblemas de la ciudad es el castillo de Edimburgo (http://www.historic-scotland.gov.uk/) y desde él se pueden contemplar las mejores vistas de la ciudad. Está abierto todos los días del año y es uno de los monumentos más visitados del Reino Unido. Las entradas cuestan 14'5 € la de adulto y 8'5 € la de niño. En ese castillo en vez de dar la hora con campanas la dan con un cañonazo, como es tradición.

La cafetería Elephant House (www.elephant-house.co.uk) es una de las cafeterías mas visitadas en Edimburgo y además es el sitio donde J.K.Rowling creó a Harry Potter, que por cierto le vino muy bien porque estaba arruinada y ha ganado bastante dinero con el niño mago. Un expresso en esta cafetería cuesta 2'6 € y un café con leche 3'3 €. Los habitantes de la ciudad van a esta cafetería a leer y a estudiar, por eso la cafetería ofrece folios en blanco para que los clientes puedan escribir a sus anchas.

A unos pocos metros de la cafetería se encuentra una de las instituciones más importantes de Edimburgo, la catedral de St. Giles. El edificio actual es del siglo XVI. El sitio más visitado de la catedral es el Thistle Chapel, donde se encuentran yelmos y utensilios de la Edad Media, para entrar hay que hacer una donación de 3 €.

El Parlamento escocés está a pocos metros de la catedral y casualmente fue diseñado por un español, en concreto por Enric Miralles.

Como en muchas ciudades, en Edimburgo también hay un lugar en el que si haces algo te da buena suerte, es el corazón de Midlothian, en el que si escupes dentro del corazón te trae buena suerte. El mosaico de adoquines en forma de corazón se encuentra ahí porque es el sitio donde estaba situada una prisión y los prisioneros asqueados por tener que ingresar en la prisión escupían justo en ese lugar.

El lugar más terrorífico de Edimburgo es el Mary King's Close, que es una calle subterránea que está llena de leyendas, apariciones y fantasmas. En esta calle la autoridad escocesa metió a más de 400 personas infectadas de peste en el año 1645, encerrándolas en sus pasadizos y tapiando las salidas, según se dice aún se escuchan los gritos de angustia de esa pobre gente, su página web es www.realmarykingsclose.com, está abierto todos los días del año y el recorrido puede durar una hora.

Edimburgo es una ciudad que inspira a muchos escritores, sobre todo escritores de historias de crímenes, como por ejemplo Arthur Conan Doyle (del que hay una estatua), creador de Sherlock Holmes.

Si eres un mochilero estás de suerte porque en Edimburgo se encuentra el Brodiel Hostel (www.brodielshostels.co.uk) donde la noche te sale entre 9 y 19 €.

El Haggis es el plato típico escocés más conocido y cuesta unos 9 €, se elabora a partir de asaduras de oveja o cordero y contiene pulmón, hígado corazón… mezclado con cebolla, avena, hierbas y especias; todo metido en una bolsa hecha con el estómago del animal y cocido durante varias horas, suele acompañarse de una guarnición de patata. Este plato se come tradicionalmente cada 25 de enero en el que se conmemora al poeta nacional Robert Burn.

Al norte de Escocia se encuentra el Lago Ness, un crucero submarino por este lago cuesta 15 € para los adultos y 9 € para los niños (www.lochness-cruises.com). Este lago es el más grande de gran Bretaña y tiene la profundidad de 5 campos de fútbol, sitio suficiente para el monstruo que dicen que vive en él. La leyenda dice que el monstruo salía cuando tenía hambre y se convertía en un caballo para que alguien se subiera en él y así comérselo.

Bueno, estas son algunas cosas que ver en Escocia, espero que vayáis algún día y nos lo contéis.

José Manuel Castillo Romero 1ºB