La sanción que pudiera caer sobre un alumno que se ha demostrado que estaba copiando no tiene por qué ser menos grave que el suspenso. Según el portavoz de la Universidad, José Álvarez, no se puede imponer a un alumno una sanción demasiado grave por una simple presunción de un profesor.
El alumno tiene todo el derecho, según esta normativa, a acabar su examen en toda su totalidad y no podrá ser expulsado del aula. Si el profesor encauta una "chuleta" no podrá destruirla, deberá enviarla a la comisión junto con el escrito.
Además de esto, la asistencia a las clases teóricas, podrá subir la nota media del alumno; en cambio el no asistir, no restará nota alguna.
Alumnos y profesores, ¿qué pensáis ante esta nueva normativa?
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