El hijo del piloto de rallies ya retirado Harri Rovanpera, Kalle, es un crack del volante y es que con tan sólo ocho años sigue los pasos de su padre. El pequeño piloto se desenvuelve a la perfección tanto en nieve como en tierra.
Es muy común que los pilotos de rallies empiecen pronto a coger un coche, pero no nos esperábamos algo así.
El chaval no es que conduzca a lo largo de una recta o en una distancia corta, no, él conduce por difíciles circuítos llenos de árboles y dónde es muy posible una salida de la carretera.
Su padre, no dudó en darle un coche preparando a su hijo desde tan joven. Pero, a mi parecer es demasiado pronto para que el chaval se atreva con estos circuítos. Además,creo que es un acto de irresponsabilidad de su padre, el dejarlo conducir desde tan joven.
Aunque quién sabe... igual dentro de unos años se convierte en uno de los mejores deportistas del mundo.
Aquí os dejo un vídeo sobre la conducción de este chaval que, incluso incluso se anima al final y se luce trompeando.
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